Ministerio

Edificando la unidad y la amistad entre los ancianos

Por Bob Johnson

Bob Johnson es el pastor principal de Cornerstone Baptist Church en Roseville, Michigan.
Artículo
11.03.2022

Desarrollar la unidad y la amistad entre tus ancianos es crucial para la salud de tu iglesia. La forma en que los líderes de tu iglesia se relacionan entre sí se reflejará finalmente en la forma en que la congregación se relaciona entre sí. La desarmonía en la cima creará una grave división en el cuerpo. La armonía en la cima crea seguridad y protección para el rebaño.

¿Se puede formar un equipo de ancianos que se agraden y se lleven bien? ¿Es siquiera posible? ¡Sí!

Durante años he sido muy servido por un equipo de hombres que disfrutan el vínculo que se ha desarrollado entre compañeros pastores del rebaño. Los tiempos de alegría y desafíos mutuos han forjado amistadas entrañables. Cuando los hombres se retiran luego de cumplirse su período, muchos expresan el deseo de volver a trabajar. Esto es extremadamente gratificante.

Así que, ¿cómo lo hacemos? En primer lugar, quiero reconocer algunos de los retos y luego presentar algunas ideas.

RETOS PARA LA UNIDAD Y LA AMISTAD ENTRE LOS ANCIANOS

¿Cuáles son algunos de los retos para la unidad y la amistad entre los ancianos?

Suponiendo que tus ancianos están teológicamente y filosóficamente en sincronía, existen algunos obstáculos prácticos que pueden surgir. Por ejemplo, si tienes algunos ancianos que forman parte del personal remunerado de la iglesia y otros que no, aquellos que se ven durante la semana tendrán un nivel de camaradería que puede hacer que los otros se sientan excluidos. Esto será casi imposible de superar si los ancianos del personal discuten constantemente los temas y acuerdan una posición o curso de acción antes de que el resto se una a la conversación.

No puedo expresar con suficiente fuerza lo desalentador que puede ser para los ancianos laicos cuando se les hace sentir que ya se ha establecido una dirección antes de que hayan tenido la oportunidad de opinar.

Además, los nuevos ancianos se sentirán naturalmente excluidos y no entenderán las bromas internas u otros asuntos de este tipo. Asimismo, los ancianos que tienen una edad diferente a la del pastor principal tendrán a menudo la tendencia a sentir que no encajan del todo. Y si en nombre de la eficiencia y la organización se cuenta con un pequeño grupo de ancianos que funciona como equipo de administración, el resto de los ancianos puede darse cuenta rápidamente de que esos pocos establecerán un consenso, y los dejarán para que pongan el sello.

Pero el reto más grande para la unidad y la amistad entre los ancianos es nuestra tendencia a utilizar una posición de liderazgo como un medio para ser servidos en lugar de servir.

Por tanto, los siguientes pasos no serán útiles a menos que estamos cultivando constantemente una cultura de humildad impulsada por el evangelio y un liderazgo de servicio.

Un año compré delantales de cocinero para todos los ancianos y grabé sus nombres en ellos. Los entregué públicamente para recordarles a ellos y a la congregación que estamos aquí para servir. Es necesario y útil leer regularmente en grupo pasajes como Juan 13, Hechos 20, Filipenses 2, 1 Tesalonicenses 2 y 1 Pedro 5.

FORMAS DE EDIFICAR LA UNIDAD Y LA AMISTAD ENTRE LOS ANCIANOS

Con todo eso en mente, aquí tenemos algunas sugerencias específicas para cultivar la unidad y la amistad entre los ancianos:

1. Cada año los ancianos firman públicamente nuestra declaración doctrinal y pacto de la iglesia. Esto nos brinda la oportunidad de presentarnos ante la congregación y ratificar nuestro compromiso de cuidar nuestras vidas y doctrina. También me da la oportunidad de recordarnos el desafío de ser líderes siervos.

2. Tenemos un retiro para ancianos cada año. Este tiempo lejos es invaluable para que nuestros hombres se conozcan, oren juntos, jueguen y tengan comunión. También tenemos algunas sesiones estratégicas acerca de la evaluación de la salud de la iglesia, planificación a largo plazo y metas a corto plazo. Pero la parte más beneficiosa del retiro es por mucho la formación de equipo que resulta del tiempo concentrado que pasamos juntos.

3. Tenemos dos reuniones al mes. La primera se centra en nuestra supervisión del rebaño, y la segunda se centra en nuestra supervisión mutua. En esta segunda reunión, estudiamos temas pertinentes, discutimos sobre asuntos personales y familiares, oramos los unos por los otros, confesamos el pecado y el desánimo y nos regocijamos por las bendiciones de otros. La transparencia de estas reuniones ha dado lugar a amistades más profundas y a la confianza entre los muchachos. Creo que esta es la principal razón por la que los ancianos presentan tal imagen de unidad a la congregación.

4. Todas las peticiones de oración que se comunican a la oficina de la iglesia durante el día se envían por correo a los ancianos. A veces hay entre 5 y 10 correos al día, pero de esta forma todos conocemos las necesidades del rebaño, y no solo unos cuantos.

5. Cada cierto tiempo nos reunimos en el hogar de alguien solamente para comer juntos o compartir una noche sin agenda.

6. Cuando me siento abrumado, me comunico con todos los ancianos y pido sus oraciones. Esta confesión de debilidad no solo les permite hacer lo mismo, sino que consigue que oren por mí y a su vez por los demás.

7. Rara vez o nunca, seguimos adelante con una decisión si hay un solo un voto en contra. No es que tengamos una política de que cada decisión tenga que ser unánime, pero realmente nos preocupamos por cada hombre, y nos tomamos en serio sus dudas. Esto sucedió hace algunos meses y, sinceramente, esperaba que pudiéramos por razones de tiempo. Pero otro anciano expresó su preocupación por el hermano que no estaba de acuerdo con la decisión. Su preocupación hizo que el hermano se animara a expresar aún más sus ideas en lugar de sentirse avergonzado por ser el único disidente.

8. Lo que se discute en las reuniones se queda entre los ancianos únicamente.

A continuación, comparto algunas ideas adicionales de Don Magee, pastor de Lakes Baptist Church en Walled Lake, Michigan. Son tan buenas que creo que las estaré implementando.

1. Durante el año, agendamos un viernes por la noche para cenar con nuestras esposas y realizamos una sesión de preguntas y respuestas sobre cualquier cosa en la que las damas se sientan desinformadas. Seguimos con un tiempo de oración por las necesidades personales de nuestras familias y luego disfrutamos de algunos juegos juntos.

2. En Navidad, recibimos a los ancianos y sus familias en nuestra casa. Mi esposa da regalos a todos los niños.

 

Traducido por Nazareth Bello