
La paciencia: Un superpoder del pastor
La virtud de la paciencia pastoral es un fruto que solo puede producir en nosotros el Espíritu efusivo de Cristo (Gá. 5:22-23). Alegrémonos, pues, de depender de Él para tener la paciencia perseverante de acabar bien, por su gracia y para su gloria.

Cómo examinar los requisitos de los candidatos a ancianos
Podemos cometer errores a veces en la selección de ancianos. Probablemente los cometeremos. Pero podemos confiar en los requisitos de Dios para los ancianos, y podemos hacer nuestro mejor esfuerzo para reconocer a los ancianos que Dios ha levantado para su iglesia.

Por qué nuestra iglesia pasó de una política presidida por ancianos a un congregacionalismo dirigido por ancianos
El liderazgo de la iglesia: la Iglesia debe ser dirigida por una pluralidad de ancianos calificados espiritualmente, llamados a pastorear un rebaño particular. Seis llamados: supervisar, pastorear, enseñar, equipar, modelar y multiplicar.

Cuatro formas de amar a los ancianos laicos
Nuestra congregación pudo seguir adelante gracias al fiel liderazgo de nuestros ancianos laicos. Esta es una de las muchas razones por las que una iglesia debe adoptar una pluralidad de ancianos. Continuamos nuestro ministerio evangélico porque teníamos cinco hombres calificados para liderar cuando uno de ellos cayó. Hermanos y hermanas, nombren a hombres piadosos y calificados para que los pastoreen. Confíen en ellos a lo largo de los años. Si lo hacen, la iglesia será más fuerte por ello.

¿Soy un gong ruidoso? Reflexiones pastorales sobre el amor
El amor nunca debe oponerse a la verdad. Un pastor «amoroso» que abandona la sana doctrina en realidad no ama en absoluto. Mil visitas por enfermedad no cambiarán eso; la gente necesita la verdad más que un abrazo. Y, sin embargo, la Biblia nunca hace que el amor sea enemigo de la verdad. Son buenos amigos, más cercanos que el comic Calvin y Hobbes. Quizás esta sea una de las razones por las que el Señor le preguntó tres veces a Pedro si lo amaba antes de ordenarle al apóstol: «apacienta mis ovejas»

Una palabra de estímulo para animar a tus pastores
Amigo, si estás en una iglesia saludable, y espero que lo estés, de vez en cuando toma tiempo para enviar un mensaje de texto, llamar o reunirte con tu pastor. Nunca entenderás realmente lo que significa para ellos escuchar tus palabras de ánimo.

Pastor, tu tiempo está comprado
Pastor, tu tiempo está comprado para que puedas guiar a tu pueblo en una fidelidad impotente. Para que puedas ser un ejemplo para el rebaño de lo que parece ser débil, pero es fuerte en el Señor (1 Corintios 12:10). Pastor, tu tiempo está comprado para que gozosamente te derrames a ti mismo por tu pueblo y que por el poder del Espíritu Santo, sean arraigados, edificados y afirmados en su fe (Col. 2:6–7).

Cuatro mentiras que provocan que los pastores descuiden a sus familias
Los pastores, en especial los plantadores de iglesias y aquellos que llegan a una nueva iglesia, son fuertemente tentados a ceder a estos requisitos familiares por el bien de su nuevo rebaño. No obstante, para que Dios apruebe y bendiga nuestro pastoreo, debemos pastorear a aquellos que están más cerca de nosotros: nuestras familias.

Aprende a pastorear con pastores fieles e iglesias sanas
Todo pastor es una oveja antes de ser pastor. Una de las mejores formas de prepararte para ser pastor es unirte a una iglesia sana y dedicarte a ser un miembro fiel. Independientemente de que una iglesia te ofrezca o no una formación formal, una iglesia sana incubará a un aspirante a pastor mucho mejor que una insana.

Edificando la unidad y la amistad entre los ancianos
Desarrollar la unidad y la amistad entre tus ancianos es crucial para la salud de tu iglesia. La forma en que los líderes de tu iglesia se relacionan entre sí se reflejará finalmente en la forma en que la congregación se relaciona entre sí. La desarmonía en la cima creará una grave división en el cuerpo. La armonía en la cima crea seguridad y protección para el rebaño.

Lo que significa y no significa ser «apto para enseñar»
Pastor, recuerda, Dios requiere claridad, no inteligencia; fidelidad doctrinal, no florecimiento retórico. Como se ha dicho, otros podrían ser capaces de enseñar mejor el Evangelio, pero no pueden predicar un mejor evangelio. Podrías no ser elocuente o efectivo según los estándares del mundo, pero Dios aún podría considerarte «apto para enseñar».

Siete consejos para el joven predicador que antes fui
Dios nos está llamando a los predicadores a mostrar progreso a nuestras congregaciones, no perfección. Definitivamente no he dominado la predicación, lo que sea que signifique “dominar”, pero por la gracia de Dios he mostrado progreso en los últimos 15 años en la lectura de las Escrituras, la predicación y la enseñanza. Y por su gracia tú también lo harás.

Pastor: Cuida tu corazón
Cuando Pablo lista las cualidades de un fiel anciano y ministro de la Palabra, el carácter y la conducta triunfa sobre la aptitud ministerial, pues solo un corazón limpio y una conducta intachable nos permitirá ser la encarnación de Cristo a nuestra congregación local

El pastor también necesita descansar
La gran mayoría de los pastores “se queman” no por problemas de fuerza física; es porque están agotados espiritualmente. Usualmente se agotan porque no han estado descansando frecuentemente ante los pies de Jesús. Muchos de ellos han estado laborando por años como Marta, enfocados en todo lo que hacen para Jesús y no en lo que Jesús hizo por nosotros y en lo que Él es para nosotros.

La importancia de la aplicación en la predicación
Si todo mensaje predicado en la Biblia tenía aplicación, esto nos lleva a reflexionar sobre la naturaleza misma de la predicación. C.H. Spurgeon dijo: “¡Cuando empieza la aplicación, empieza la predicación!”. La diferencia esencial entre una mera enseñanza y una predicación reside principalmente en la presencia o no del elemento de aplicación y de exhortación.

El Pastor Irreprensible
¿Cómo queremos ser recordados en la tierra? ¿Cuál es el galardón que esperamos en el cielo? ¿Qué mencionarán los vivos cuando hayamos pasado a morar nuestra eternidad? Ojalá y puedan testificar que fuimos hombres de Dios, gente de una sola pieza, intachables e irreprensibles, que servimos bien a nuestra congregación y a nuestra ciudad. Pero sobre todo, que el día que lleguemos frente al trono eterno de Dios, escuchemos una voz “como estruendo de muchas aguas” que proclame: “Ven buen siervo y fiel, en lo poco has sido fiel, en lo mucho te pondré. ¡Entra en el gozo de tu Señor!”.

La Libertad que Viene de Ser Aburridamente Bíblico
Bien sea en consejería privada o proclamación pública, los pastores están llamados a poner las glorias de Cristo ante su pueblo incluso cuando las tragedias de este mundo y el pecado en sus corazones tratan de engañarlos para que crean las mentiras del Maligno.

¿Quieres ser Pastor? Sé alguien digno de imitar
Ser pastor es vivir tu vida en público. Incluso cuando estás apagado, estás encendido. Si quieres ser pastor, prepárate para ser observado y comienza a dar un ejemplo que valga la pena observar.

La Esperanza del Cielo al Inicio del Ministerio
Resiste. En tu peor día, o durante tu peor semana, o después de lo que puede parecer el peor comienzo posible del ministerio que puedas imaginar, hay razones para regocijarte, razones para mantener la esperanza. Tu nombre está escrito en los cielos. Queridos hermanos, pongamos nuestra mirada más allá de unas pocas décadas. Pongamos nuestra mirada en la eternidad. Mantengamos el cielo como la visión y el combustible de nuestro ministerio, y trabajemos hasta llegar allí.

¿Pueden los hombres solteros servir como ancianos?
Es esencial que el proceso de filtrado de candidatos a ancianos se lleve a cabo de acuerdo con los requisitos bíblicos. Esto significa que los hombres no calificados deben filtrarse. Pero esto también significa que los hombres calificados no deben ser filtrados por una exégesis defectuosa. Los hombres solteros piadosos pueden servir como ancianos de una iglesia local, y sus iglesias serán ricamente bendecidas por su devoción resuelta al Señor en el pastoreo de su rebaño.

Pastor, Deje de Mentir
Cuán fácil es juzgar el corazón de un hermano mientras tu propio corazón está mintiéndote acerca de ti mismo. Alabado sea Dios porque el Espíritu Santo revela de manera fiel lo que hay en nuestros corazones. Alabado sea Dios por aquellos que están en Cristo no tienen que ocultar nada más.

Reseña del libro: 7 Challenges Pastors Face [7 desafíos que enfrentan los pastores], de David Horner
La Biblia tiene muchas cosas objetivas que decir sobre lo que un pastor está llamado a hacer. Debemos guiar a la iglesia en hacer discípulos (Mt. 28:19), predicar la palabra (2 Ti. 4: 2) y exhortar y reprender con toda autoridad (Tito 2:15) por nombrar algunas cosas. Estas ciertamente se llevarán a cabo de manera diferente según el contexto y cómo Dios ha creado al pastor individualmente, pero todos los pastores tienen la misma descripción de trabajo del Señor.

Encontrar ancianos en las iglesias de inmigrantes
Un pastorado unido es una fuerza poderosa en una iglesia local. A medida que los pastores pastoreen fielmente a los que están a su cuidado y capaciten a los nuevos líderes, Cristo continuará asegurándose de que su iglesia reciba más líderes que estén deseosos por equipar a los santos para la obra del ministerio (Efesios 4: 11-12).

La iglesia necesita menos hombres que se sientan «llamados» al ministerio
Haz que los requisitos bíblicos para el pastorado sean tu meta diaria. Al aspirar al ministerio pastoral, nunca debemos olvidar que la formación rigurosa ni la educación teológica estaban entre la lista de requisitos de Pablo. En cambio, debemos procurar en forma humilde y habitualmente un carácter como el de Cristo. Y esto no se detiene cuando somos ordenados. Al contrario, se intensifica. No podemos mirar los títulos en nuestra pared o el título al lado de nuestro nombre como evidencia de estar calificados. Antes bien, debemos vigilar constante y continuamente nuestra vida y doctrina con sumo cuidado.

Pastores Humildes
“Dios resiste a los soberbios pero da gracia a los humildes” (Stg. 4:6). Nuestra habilidad de ser efectivos en nuestra obra depende del poder de Dios. Podemos entender todo sobre un pasaje, y tener el sermón más elocuente jamás predicado, pero si Dios no respalda nuestro trabajo, en vano laboramos. La realidad es que nosotros somos utensilios en las manos de Dios. Utensilios que sin la gracia de Dios son inútiles. Pero el orgullo depende de sí mismo, no de Dios. Y Dios se opone a los soberbios porque buscan su propia gloria.