COVID-19

Cómo planificar un servicio dominical por la mañana … Al aire libre

Por Dave Russell

Dave Russell es el pastor principal de la Iglesia Bautista Oakhurst en Charlotte, Carolina del Norte. Puedes seguirlo en Twitter en @DRussinQC.
Artículo
24.09.2020

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En los últimos días, los creyentes han anhelado no el regreso a un espacio sagrado, sino el regreso a una asamblea sagrada. Anhelamos reunirnos con nuestra familia de la iglesia y adorar a Dios juntos en el Día del Señor (He. 10: 24–25).

En mi estado (Carolina del Norte), nuestro gobernador recientemente dio órdenes para la Fase Uno de reapertura. Esto permitió los servicios de adoración al aire libre, con la condición de que todas las personas permanecieran socialmente distanciadas.

Nuestros ancianos tomaron la decisión de avanzar con una reunión al aire libre, el primer domingo de apertura. Obviamente, al principio no sabíamos cómo hacerlo. Pero el Señor nos dio la sabiduría en el camino. Si estás planificando una reunión al aire libre, aquí hay diez cosas que necesitas considerar.

  1. Prepárate ahora

Pudimos decidir rápidamente realizar un servicio al aire libre porque ya habíamos pensado en esta opción semanas antes de que se anunciara. Ya habíamos comparado un servicio exterior con un servicio interior, y nos dimos cuenta de que un servicio exterior tenía varias ventajas. En primer lugar, no restringió nuestra capacidad, por lo que pudimos mantener una asamblea. Además, un servicio al aire libre no requería limpiar las áreas, y evitaba que nuestros miembros se encontrarán en espacios interiores restringidos (pasillos, escaleras, etc.).

Consideramos las cosas básicas de lo que se necesitaría para tener la iglesia en un espacio abierto y comenzamos a comprar el equipo de audio adicional que necesitábamos.

  1. Piensa en todas las formas en las que puedes hacer el servicio «sin contacto»

Nuestro estado requería distanciamiento social en todo momento, y felizmente cumplimos con esto. Para hacerlo, tuvimos que considerar cómo minimizar cualquier contacto.

Desde el momento en que nuestra gente llegó al estacionamiento hasta el momento en que se fue, queríamos planear que no hubiera contacto con personas fuera de su hogar, así como con cualquier superficie o material. Entonces, les pedimos a todos que trajeran sus propias sillas. Enviamos los boletines por correo electrónico con las letras de las canciones. Algunos los imprimieron en casa, mientras que otros los siguieron en su teléfono. También adquirimos un servicio de mensajería de texto que permitió a nuestra gente recibir un texto que proporcionaba un enlace para un boletín digital. Esto les permitió dar una suscripción a través del texto.

Nos dimos cuenta de que algunos aparecerían en nuestro servicio sin sillas ni teléfono. Para prepararnos para esto, tuvimos algunas sillas disponibles. También proporcionamos algunos boletines impresos que estaban disponibles sin contacto.

  1. Resuelve el asunto de las mascarillas

No requerimos más de lo que nuestro gobierno estatal requería. Nuestras órdenes estatales no requerían el uso de mascarillas, pero las alentaron. Excepto en los momentos en que estás afuera y puedes permanecer a dos metros de distancia de los demás.

Hicimos lo mismo con nuestro servicio. Solicitamos a todo nuestro personal y voluntarios usar mascarillas antes y después del servicio. Queríamos seguir lo que alentaban nuestros funcionarios estatales y queríamos mostrar consideración hacia los asistentes. Pero no exigimos que todos los asistentes usaran mascarillas.

Necesitarás decidir qué requerirás de las personas y luego comunicar claramente lo que decidas.

  1. Resuelve qué vas hacer con los niños

Solicitamos que los niños permanezcan con sus padres en todo momento. Entendimos el desafío de tener a un niño pequeño sentado en un lugar durante mucho tiempo. Preparamos a nuestra gente para comprender que este servicio sería reverente en la adoración, pero informal en la atmósfera. A la luz de esto, alentamos a nuestras familias a que se sintieran libres de traer mantas, cochecitos, juguetes, bocadillos, libros y todo lo que necesitaban para hacer de esto una experiencia más cómoda.

  1. Plan para invitados

Tuvimos una serie de invitados. Normalmente, tenemos una «tarjeta de bienvenida» para que los invitados la completen y la entreguen. De acuerdo con nuestro plan de «no contacto», creamos una tarjeta de bienvenida digital a la que se podía acceder a través de nuestro servicio de mensajería de texto. Durante nuestros anuncios normales, instruimos a nuestros invitados a enviar un mensaje de texto a nuestro número, para recibir un enlace para una tarjeta de bienvenida digital que podrían enviar en su teléfono. Esto dio como resultado que recibiéramos varias tarjetas de invitados, con las que podemos hacer un seguimiento.

  1. Considera lo que hará con los baños

Sé de algunas iglesias que mantuvieron sus baños cerrados para su servicio al aire libre. Decidimos pedirle a nuestra gente que planeara no ir al baño, pero les informamos que abriríamos un baño en caso de que fuera necesario. Se colocó a un voluntario fuera de la entrada del edificio y se le permitió una unidad individual o familiar en el edificio a la vez.

  1. Planifica un servicio que sea normal y diferente

Nuestro servicio fue normal. Cantamos, leímos las Escrituras, oramos y tuvimos un sermón. Nuestro servicio también fue diferente. Estábamos al aire libre y nuestros hijos intentaban sentarse durante todo el servicio. Así que acortamos la duración de nuestro servicio a alrededor de una hora. Cantamos dos canciones menos, una lectura de las Escrituras menos y un sermón que fue 15 minutos más corto de lo normal.

  1. Apunta a las personas por encima de la presentación

Será difícil para muchas iglesias replicar en exteriores lo que normalmente hacen en interiores. ¡Pero no dejes que eso te impida planificar una reunión al aire libre! Era demasiado soleado para mostrar las letras de canciones en una pantalla. Nuestra plataforma provisional era demasiada pequeña. Nuestro nuevo sistema de sonido para exteriores no podía acomodar la cantidad de músicos que normalmente tenemos.

Pero hicimos los ajustes necesarios para adaptarnos. ¡El aspecto más importante de un servicio de adoración es que Dios es glorificado y el evangelio de Jesucristo es predicado! Por tanto, busca la excelencia en la planificación de los detalles de este servicio, pero mantén que tu enfoque principal igual.

  1. Comunica tus planes a través de diversos medios

Este será probablemente tu primer servicio de adoración al aire libre. Por tanto, la gente no sabrá qué está pasando o qué esperar. Esto significa que probablemente necesitarás comunicarte excesivamente. Considera los diversos medios que puede usar. Dimos instrucciones por correo electrónico, una llamada de Zoom, un enlace de «preguntas frecuentes» en nuestro sitio web y un anuncio de video grabado a través de otro correo electrónico que enviamos. También, pasamos varios minutos al comienzo del servicio recordándoles a todos los protocolos de seguridad.

La gente necesita estar al tanto de lo que se les requiere. Necesitan que se les diga cómo mantener el distanciamiento social durante todo el tiempo. Así que, infórmales de todo lo que estás haciendo por su seguridad y por el cumplimiento con el estado. Mientras tanto, no olvide a aquellos que son de alto riesgo o que aún no se sienten cómodos reuniéndose en grandes grupos. Dales instrucciones para acceder a la transmisión en vivo del servicio.

  1. ¿Qué acerca de las iglesias más grandes?

Nuestra iglesia tenía un promedio de más de 350 asistentes antes de la orden de quedarse en casa. Me doy cuenta de que una iglesia de mil (1.000) personas tendrá mucho más para considerar. Pero esta opción no es solo para iglesias más pequeñas. Las iglesias más grandes generalmente tienen más personal, equipo, recursos y voluntarios. Usa esos recursos para considerar cómo podrías reunir a tu gente. Considera alquilar un estadio de fútbol de la escuela secundaria o campos deportivos locales.

Animaría a cada iglesia a que al menos considere una reunión al aire libre, tan pronto como lo permitan sus gobiernos locales. La asamblea del pueblo de Dios en el día del Señor es la reunión más importante en la Tierra. Ya sea que nos reunamos en nuestras instalaciones normales o en un campo en un día caluroso, no anhelamos un lugar sagrado sino una asamblea sagrada con un pueblo sagrado, en el que adoramos a Dios y exaltamos al Señor Jesucristo juntos.


Traducido por Renso Bello