Artículos

Por qué Charles Spurgeon sigue siendo popular

Por Aaron Lumpkin

Aaron Lumpkin (candidato a doctorado, Seminario Teológico Bautista del Sureste) sirve como ministro del campus y director de fe y servicio en la Universidad Bautista de Missouri en St. Louis, Missouri. Es coautor de The Sum and Substance of the Gospel (La suma y sustancia del evangelio).

Por Nathan A. Finn

Nathan A. Finn es el decano de la Escuela de Teología y Misiones y prefesor de pensamiento y tradición Cristiana en Union University en Jackson, Tennessee.
Artículo
19.01.2022

Charles Haddon Spurgeon (1834-1892) permanece como una figura de popularidad perenne entre pastores y otros líderes cristianos. Las biografías de Spurgeon abundan, casi todas de tono pastoral y escritas para lectores comprensivos y ansiosos de inspiración. Su autobiografía, compilada por su esposa después de su muerte, sigue siendo el mejor punto de partida para aprender sobre su vida y su legado.

Los propios escritos de Spurgeon han permanecido accesibles debido a las reimpresiones. Hoy, muchos creyentes continúan beneficiándose de sus sermones publicados, especialmente The Metropolitan Tabernacle Pulpit (El púlpito del Tabernáculo Metropolitano) (63 vols.) y The New Park Street Pulpit (El púlpito de la capilla New Park Street) (6 vols.). Leen sus libros clásicos como: El tesoro de David (1870), Discurso a mis estudiantes (1875), y El ganador de almas (1892), entre muchos otros. ¡El “Príncipe de los predicadores” vive a través de la influencia de su prodigiosa producción!

En los últimos años, Spurgeon también ha llamado la atención de los académicos del mundo de habla inglesa. Se han defendido varias disertaciones en la última década, muchas de las cuales probablemente se publicarán en los próximos años. En la actualidad, el “centro de gravedad” para los estudios de Spurgeon es el Spurgeon Center for Biblical Preaching (Centro Spurgeon para la predicación bíblica) en el Seminario Teológico Bautista Midwestern, hogar de la biblioteca de Spurgeon. El Centro Spurgeon también está detrás del proyecto The Lost Sermons of C.H. Spurgeon (Los sermones perdidos de C. H. Spurgeon), publicado por B&H Academic.

Una de las facetas interesantes del legado de Spurgeon es que llama la atención de una amplia audiencia. Los bautistas de todas las tendencias teológicas aman al hombre que posiblemente sea el pastor más famoso de su tradición. Los calvinistas no bautistas también lo reclaman como uno de los suyos. Spurgeon ha sido, por mucho tiempo, una figura popular entre los fundamentalistas. El aprecio contemporáneo por Spurgeon trasciende las tribus, algo que no podría decirse de todas las figuras notables de la historia cristiana.

SPURGEON EL BAUTISTA

Charles Spurgeon fue un bautista reconocido. Aunque se crió como independiente (congregacionalista) y se convirtió en una capilla metodista primitiva, recibió el bautismo de los creyentes y se unió a la Capilla Bautista St. Andrew’s Street en Cambridge. Por el resto de su vida, Spurgeon se mantuvo comprometido con los distintivos bautistas básicos, como son: el bautismo de creyentes por inmersión, la política de la iglesia congregacional, la autonomía de la iglesia local, y la libertad religiosa para todos. Spurgeon creía firmemente que las iglesias bautistas eran iglesias del Nuevo Testamento, lo cual ha sido una forma de hablar común del bautista al referirse a sus congregaciones.

Aunque Spurgeon predicó en varios tipos de iglesias y en otros lugares, su propio ministerio pastoral se llevó a cabo en congregaciones bautistas. Después de ganar algo de experiencia como predicador itinerante, a los 17 años fue pastor de la capilla bautista en Waterbeach. En enero de 1854, se convirtió en el pastor de la capilla de New Park Street en Londres, la cual fue una vez la iglesia de prominentes bautistas como: Benjamin Keach, John Gill, y John Rippon. Spurgeon serviría allí hasta su muerte, aunque la iglesia cambió su nombre a Tabernáculo Metropolitano en 1861. Spurgeon también participó activamente en la vida denominacional bautista en Inglaterra, especialmente en lo que respecta al trabajo de la Sociedad Bautista Misionera.

SPURGEON EL CALVINISTA

Spurgeon no era solo un bautista. Fue un bautista particular que afirmó los “cinco puntos” del calvinismo a lo largo de su vida. Fue criado por sus abuelos paternos; su abuelo, James Spurgeon, era un pastor independiente con una gran biblioteca de obras principalmente puritanas. El joven Spurgeon bebió profundamente de los escritos de autores como: John Foxe, John Bunyan, Richard Baxter, y Joseph Alleine. Poco después de convertirse en pastor de la Capilla de New Park Street, Spurgeon volvió a publicar una edición ligeramente revisada de la Segunda Confesión de Londres, una declaración calvinista redactada por primera vez en 1677 arraigada en la tradición confesional de Westminster de teología reformada.

El calvinismo es evidente en todos los sermones de Spurgeon, y muchos de sus libros tratan abiertamente las “doctrinas de la gracia”. Fue crítico de la Iglesia de Inglaterra en parte porque entendía que seguía estando demasiado influenciada por el catolicismo y, por lo tanto, no era suficientemente reformada.

Estaba preocupado por el arminianismo progresivo entre los bautistas particulares británicos, especialmente mientras la Unión Bautista daba pasos a lo largo de la Era Victoriana que terminaron en la fusión formal con los Bautistas Generales en 1891. Aunque fue un bautista comprometido, Spurgeon encontró numerosas formas de cooperar con otros evangélicos calvinistas. Hasta el día de hoy, no es raro escuchar a Spurgeon referido como el último de los puritanos debido a su firme compromiso con el calvinismo experimental.

SPURGEON EL FUNDAMENTALISTA

Años después, las controversias denominacionales de las décadas de 1920 y 1930 llevaron a muchos evangélicos a llamarse a sí mismos fundamentalistas, porque entendían que estaban defendiendo las doctrinas fundamentales de la fe cristiana. Alrededor de 1950, el fundamentalismo había llegado a identificarse más estrechamente con los teólogos conservadores que se habían separado de sus denominaciones porque estas toleraban las tendencias teológicas modernistas/liberales. Esto fue décadas antes de que los periodistas occidentales atribuyeran la Revolución iraní al “fundamentalismo islámico”, lo cual desafortunadamente produjo una asociación simplista entre el fundamentalismo y las creencias y prácticas religiosas ultraconservadoras, potencialmente violentas. Por ende, los separatistas conservadores de mediados de siglo consideraron que el título de “fundamentalista” era una insignia de honor y un signo de fidelidad a las Escrituras.

Sería inadecuado llamar a Spurgeon un fundamentalista, ya que ese movimiento no se formó de manera definitiva hasta la generación que siguió a su muerte. Sin embargo, los fundamentalistas siempre lo han considerado como una especie de “padre fundador” de su tradición. Durante sus últimos años, se vio envuelto en lo que se llamó la controversia de la degradación en la Unión Bautista. A Spurgeon le preocupaba que demasiados bautistas británicos, en especial los bautistas generales a quienes la Unión Bautista estaba conquistando, eran tolerantes de puntos de vista liberales sobre interpretación bíblica, la expiación, y la exclusividad de Cristo.

Después de un período de controversia escrita y de esfuerzos fallidos de reconciliación personal, Spurgeon y muchos de los miembros de su círculo de influencia rompieron lazos con la Unión Bautista. Los fundamentalistas entendieron la separación de Spurgeon de su denominación (una generación anterior) como precursora de sus propias controversias en el siglo XX.

Spurgeon el Influyente

Más se podría escribir sobre el atractivo de Spurgeon. Su capacidad de equilibrar fuertes convicciones bautistas con la voluntad de cooperar con creyentes en otras tradiciones lo convirtió en una figura atractiva dentro del movimiento evangélico de la posguerra. Del mismo modo, el hecho de que pastoreara una iglesia que superaba los 5.000 asistentes regulares en su apogeo, le ha ganado un lugar especial en el corazón de los pastores modernos de megaiglesias. Los pastores contemporáneos que han comenzado colegios bíblicos y seminarios como ministerios de sus iglesias, a menudo se identifican con Spurgeon porque él dio el mismo paso con su Colegio de Pastores.

Charles Spurgeon fue una figura demasiado importante cuya identidad fue moldeada por diversas influencias y experiencias que hacen que sea natural que varios cristianos contemporáneos se identifiquen con él. Por esa razón, probablemente seguirá siendo una figura inspiradora para los pastores y un fructífero tema de estudio para historiadores y teólogos por muchos años más.

 

Artículo publicado primero en Coalición por el Evangelio