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¿Qué pasa con los clips de película? Aplicando el Principio Regulativo

Por Aaron Menikoff

Aaron Menikoff es Pastor Principal de la Iglesia Bautista Mt. Vernon en Sandy Springs, Georgia.
Artículo
25.11.2019

Había sido pastor por sólo unos meses cuando un miembro fiel me buscó para discutir sobre el uso de los medios en los servicios. Anteriormente, él había llevado a pastores a incorporar el video y clips de sonido, y quería ser de ayuda para mí. Él comenzó con una pregunta amable como esta:

«Así que, ¿Qué piensas sobre los clips de películas en los servicios?»

«Bueno, realmente no he planeado utilizar los medios en los servicios».

«¿En verdad? He estado involucrado en la adoración por algún tiempo, y es una manera muy efectiva de comunicarse».

«Si, no lo dudo. Pero me temo que puede distraer a las personas del corazón del servicio: los cánticos, la predicación, y la oración de la Palabra».

«No pensaría en ello como una distracción, más que como una añadidura, porque hace que el servicio sea mejor».

«Puede que tengas razón, pero realmente quiero que nuestro enfoque sea en el poder de la Palabra de Dios para involucrarnos y motivarnos, así que voy a permanecer sin los clips de películas».

Y así fue como la conversación terminó. Éramos dos hombres adultos que amaban al Señor pero con diferentes puntos de vista sobre lo que honraría más a Dios y sería de más ayuda para esta iglesia local. Si estuvieras en mis zapatos, ¿cómo habrías respondido a esta pregunta?

A través de los años, me han solicitado intervenir en muchos de estos temas relacionados con nuestro servicio de domingo en la mañana.

¿Deberíamos nosotros tener banderas el día de la independencia? Dije que no, luego de investigar lo que significaba tener banderas.

¿Decoración navideña? Dije que sí.

¿Lecturas dramáticas de las Escrituras? No.

¿Un coro de niños? Si, un par de veces al año.

¿Una caja de recaudación de fondos en el vestíbulo? No.

¿Campanillas? Si.

¿Clips de películas? Ver más arriba.

Como puedes probablemente decir a partir de estos ejemplos, vine a una iglesia establecida con sus propias costumbres y tradiciones. Si estás plantando una iglesia, supongo que eres más dado a que se pida tu opinión sobre el incienso, la galería de arte en el vestíbulo, la vanguardia e incluso la música secular. Me preocupo menos porque llegues a la misma conclusión que tengo sobre cualquiera de estos ejemplos. Lo que sí quiero que te des cuenta es que las Escrituras no están en silencio sobre la adoración corporativa.

CINCO PAUTAS PARA TOMAR DECISIONES PIADOSAS

El principio regulador me ayuda a responder a esta clase de preguntas. El principio regulador dice que las Escrituras regulan lo que es permisible hacer en la adoración pública. Y aquellos que mantienen el principio regulador abordarán cada pregunta cuidadosamente, preguntando no simplemente «¿qué permitirá Dios? sino también ¿qué prefiere Dios?».

Las siguientes cinco pautas, fundamentadas en el principio regulador, me han ayudado a identificar cuáles prácticas honran a Dios apropiadamente y ayudan a su pueblo en nuestras reuniones semanales.

1. La adoración corporativa está enfocada en la Palabra.

Primero, la adoración corporativa está enfocada en la Palabra. Después que Pablo le dijo a Timoteo acerca del poder de las Escrituras para cambiar las vidas (2 Timoteo 3:16-17) él ofreció esta simple exhortación: «Predica la Palabra» (4:2). Mi deber pastoral más importante es presentar las Escrituras ante mi iglesia, sabiendo confiadamente que el Espíritu puede aplicarla a la vida de las personas y producir madurez espiritual.

Una reunión cristiana debería ser no simplemente bíblica en algún sentido general y abstracto. Debería estar tan saturada con las Escrituras, que sea obvio para todos que creemos que Dios trabaja poderosamente a través de Su Palabra, mientras predicamos la Palabra, cantamos la Palabra, y oramos la Palabra. No quiero aprobar nada que nos distraiga de las Escrituras.

2. La adoración corporativa está enfocada en el evangelio.

Segundo, la adoración corporativa está enfocada en el evangelio. Pablo se jactó del hecho de que predicaba a Cristo: «a quien anunciamos, amonestando a todo hombre, y enseñando a todo hombre en toda sabiduría, a fin de presentar perfecto en Cristo Jesús a todo hombre» (Colosenses 1:28). Proclamar a Cristo significa revelar el evangelio ante la iglesia. Una sierra sin filo no puede cortar un árbol, y un servicio sin evangelio no puede producir madurez espiritual. La adoración corporativa debería llevar a cada participante a deleitarse en el cumplimiento de Cristo para los pecadores.

3. La adoración corporativa es congregacional.

Tercero, la adoración corporativa es congregacional. Una vez más, Pablo nos da claras instrucciones: «no os embriaguéis con vino, en lo cual hay disolución; antes bien sed llenos del Espíritu, hablando entre vosotros con salmos, con himnos y cánticos espirituales, cantando y alabando al Señor en vuestros corazones» (Efesios 5:18-19). «La palabra de Cristo more en abundancia en vosotros, enseñándoos y exhortándoos unos a otros en toda sabiduría, cantando con gracia en vuestros corazones al Señor con salmos e himnos y cánticos espirituales» (Colosenses 3:16). Estoy impresionado por la naturaleza congregacional de estos mandatos. Nosotros, la iglesia, estamos llamados a cantar canciones «unos a otros». Esto me recuerda como el violinista de primera fila de una orquesta toca no sólo para la audiencia, sino también para los otros violinistas, y como los demás escuchan al de la primera fila. De la misma manera, los miembros de la congregación se ministran unos a otros durante el servicio de la iglesia, aún cuando oran y cantan a Dios.

4. La adoración corporativa es para la iglesia.

Cuarto, la adoración corporativa es para la iglesia. Seamos sinceros, hay una seria diferencia de opinión hoy en día sobre el propósito principal de la reunión corporativa de una iglesia, y eso afectará la manera del cómo estructuras tu servicio. Muchas iglesias resaltan que existen para los no creyentes. Ellos adaptan su música (secular) y sus mensajes (cortos) para atraer al perdido. Otras iglesias, como la mía, reconocen que frecuentemente tienen visitantes que no son creyentes, pero se enfocan en equipar a los santos para alcanzar al perdido. Y creo que vemos el último enfoque en las Escrituras. Las iglesias del Nuevo Testamento se enfocan en edificar al cuerpo (1 Corintios 14:12, 14,26), construir la unidad en el cuerpo (1 Corintios 11:17-22), y motivar a los miembros del cuerpo (Hebreos 10:24-25).

Mientras alguien dirige nuestros servicios, trato de hacer que los no creyentes se sientan bienvenidos al explicarles lo que está sucediendo durante nuestro tiempo juntos, destacando objeciones potenciales al cristianismo en el sermón, y compartiendo el evangelio de una manera preciosa y clara.

Sin embargo, cuando pienso en lo que deberíamos hacer cuando nos reunimos como iglesia, fundamentalmente no me preocupo por atraer a los no creyentes. La iglesia reunida está para honrar a Dios al edificar el cuerpo de Cristo. La iglesia dispersa está para honrar a Dios evangelizando al perdido.

5. La adoración corporativa es dirigida.

Quinto, la adoración corporativa es dirigida. Los ancianos deberían pastorear bajo la autoridad de Dios sin ejercer dominio sobre el rebaño (1 Pedro 5:2-3). Las congregaciones deberían seguir esforzándose por hacer su trabajo más fácil (Hebreos 13:17).

¡Qué regalo es el liderazgo piadoso! (Efesios 4:8ff)!

Estoy agradecido de dirigir con un cuerpo de ancianos que ve nuestra adoración corporativa como parte del ministerio de enseñanza de la iglesia. Sabemos que las decisiones que tomamos pueden no siempre ser populares. Algunos quieren un coro. Otros quieren música contemporánea. Debe ser tomada una decisión. Sin embargo, es importante encontrar hombres piadosos que puedan pensar a través de lo que honra más a Dios y lo que es de mayor edificación para la congregación, y entonces confiar en ellos para que dirijan en consecuencia.

CINCO CASOS DE PRUEBA

Es tiempo de entrar a la jaula de bateo para ver algunos de los lanzamientos que podrían venir a nuestro encuentro.

  1. ¿Es apropiado tener artes visuales, como parodias, en un servicio de adoración de la mañana?

En el escenario del mejor de los casos, una parodia es una dramatización de un pasaje de las Escrituras. En el escenario del peor de los casos, es un intento por atraer la atención de la congregación. Yo trataría la última como basura nuclear ¡no te acerques a ella! En lo que se refiere a la primera, estoy abierto pero soy cuidadoso. El peligro es que dramatizar un pasaje quita la alfombra de debajo del poder normal de la Palabra hablada. Ravi Zacharias hizo una declaración que nunca olvidaré: «en el principio era el Verbo, no el video». Las congregaciones deberían depender de la Palabra hablada porque Dios siempre ha usado su Palabra para edificar a su pueblo y hacer crecer su iglesia, esto es algo obvio desde Génesis hasta Apocalipsis.

  1. ¿Qué podemos decir sobre la dedicación de los niños?

Una vez al año, nuestra iglesia reconoce a los nuevos padres durante el servicio del domingo en la mañana. Como iglesia, queremos motivar a la crianza y orar por la salvación de estos pequeños. Sin embargo, ya que la adoración corporativa es congregacional, también le pedimos a los miembros de la iglesia que prometan públicamente mantener a estos padres responsables de educar a sus hijos en la disciplina y amonestación del Señor.

  1. ¿Cuánto deberíamos reconocer los feriados culturales como el cuatro de julio?

Abordo esta pregunta con la convicción de que nuestras reuniones son para la iglesia, y la iglesia consiste en creyentes con una cosa en común: salvación por fe solamente en Cristo. Por lo tanto, no planifico los servicios según los temas culturales. Aunque me aseguro de agradecer a Dios por la libertad religiosa en el cuatro, y aunque siempre oro por las madres el día de las madres, no nos dirigimos para tener un servicio del cuatro de julio o del día de las madres.

  1. ¿Debería una congregación recitar credos juntos?

Hay muchas buenas razones por las cuales incorporar declaraciones ortodoxas de fe y pactos de iglesia en nuestros servicios públicos. Nos recuerdan que Dios ha estado trabajando por siglos, haciendo su Palabra clara. Y en un mundo donde la verdad es considerada relativa, es bueno para las congregaciones ir contra la corriente y unirse públicamente en lo que se refiere a la enseñanza bíblica.

Si los credos son incorporados en un servicio de adoración corporativa, tiene que ser hecho de tal manera que la autoridad de la Biblia sea enfatizada. Un líder de servicio podría decir algo como, «esta mañana queremos confesar nuestra fe en las palabras del Credo de Nicea, uniéndonos con otros cristianos a través de los siglos que han entendido la Biblia para enseñar que Jesús es y siempre ha sido, Dios».

  1. ¿Deberíamos nosotros tener múltiples servicios divididos según la preferencia musical?

Por ejemplo, ¿deberíamos nosotros tener un servicio «tradicional» temprano en la mañana, un servicio «contemporáneo» a mitad de mañana, y un servicio «moderno» tarde en la mañana? Dejando la parte eclesiológica de los múltiples servicios a un lado, me preocupa la prudencia de dividir a la congregación según la preferencia musical. Un servicio centrado en el evangelio debería reunir a los creyentes. Si estamos en la disposición de dividir según el estilo de la música, ¿qué dice eso sobre el poder del evangelio para unirnos? Mi temor es que diga que el evangelio no es suficiente.

PARA NUESTRO BIEN, NO SOMOS LIBRES

No a todo el mundo le gustará la forma como me muevo en estos lanzamientos, y eso está bien. Los detalles del meollo de la vida de iglesia y la adoración corporativa sin duda variarán según de contexto a contexto y de iglesia en iglesia. Aquellos que sostienen el principio regulador sin duda no estarán de acuerdo con algunos de los detalles.

A pesar de todo, necesitamos tener presente que no somos libres para hacer lo que queramos, lo que sea que funcione, o lo que las personas nos pidan que hagamos. Para nuestro bien, Dios nos ha dado parámetros. La adoración corporativa debe estar enfocada en la Palabra, en el evangelio, ser congregacional, para la iglesia, y dirigida.


Traducido por Samantha Paz

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