Clases esenciales: El Noviazgo

El Noviazgo – Clase 1: Una introducción al noviazgo

Por CHBC

Capitol Hill Baptist Church (CHBC) es una iglesia bautista en Washington, D.C., Estados Unidos
Artículo
05.10.2019

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Clase esencial
El Noviazgo
Clase 1: Una introducción al noviazgo


Introducción

Bienvenido al seminario básico «El noviazgo». Aquellos de nosotros que hemos tomado clases acerca del noviazgo antes, podemos llegar a pensar: «Ya he estado allí, ya he hecho esto». Sin embargo, quiero animarte a quedarte por el material nuevo que hemos añadido, incluyendo temas como: las citas fuera de la congregación, como terminar bien, y un nuevo sermón tiutlado: «Las cosas que están mal en nuestra cultura de noviazgo» (semana 12). Así que te animamos a quedarte.

Dependiendo de quién seas, hay diferentes razones por las que estarás en esta clase:

  • Solteros: ¿Estás tú saliendo con otros de manera consistente con lo que enseñan las Escrituras (y esperamos que también con esta clase)? ¿De qué formas tu noviazgo refleja más el pensamiento del mundo? ¿De qué manera tu noviazgo refleja la Biblia y la sabiduría recibida por ti de hombres y mujeres mayores piadosas en esta iglesia?
  • Casados: ¿Están ustedes guiando a los solteros a tener un noviazgo/cortejar consistente con las Escrituras (y esperamos que también con esta clase)? ¿Están tomando tiempo para hablar con los solteros acerca de casarse algún día? (No me refiero a atacarlos por estar solteros, sino a animarlos en su búsqueda de un esposo(a).)

La palabra «noviazgo» nos da la idea de un coche tirado por caballos y personas vestidas con ropa lujosa tomando té. Nos da la idea de una terminología «antigua». Ambos términos —noviazgo y cortejo— traen consigo una carga. No me preocupa con que término comenzamos sino que lo definamos bíblicamente; los haremos sinónimos en este curso. Así que por favor no se enfoquen en la terminología.

¿Dónde se encuentran las palabras «noviazgo» o «cortejo» en la Biblia (no es así)? ¿Dónde buscamos sabiduría en las Escrituras con relación a este tema?

Cuando nos vamos a Génesis 24 encontramos un ejemplo de cómo un hombre, Isaac, encontró una esposa. Él no tomó prestado el camello de su padre para llevar a una chica al cine. En vez de eso leemos: Génesis 24:1-7:

«Abraham estaba ya entrado en años, y el Señor lo había bendecido en todo. Un día, Abraham le dijo al criado más antiguo de su casa, que era quien le administraba todos sus bienes:—Pon tu mano debajo de mi muslo, y júrame por el Señor, el Dios del cielo y de la tierra, que no tomarás de esta tierra de Canaán, donde yo habito, una mujer para mi hijo Isaac, sino que irás a mi tierra, donde vive mi familia, y de allí le escogerás una esposa.—¿Qué pasa si la mujer no está dispuesta a venir conmigo a esta tierra? —respondió el criado—. ¿Debo entonces llevar a su hijo hasta la tierra de donde usted vino?—¡De ninguna manera debes llevar a mi hijo hasta allá! —le replicó Abraham. El Señor, el Dios del cielo, que me sacó de la casa de mi padre y de la tierra de mis familiares, y que bajo juramento me prometió dar esta tierra a mis descendientes, enviará su ángel delante de ti para que puedas traer de allá una mujer para mi hijo» (NVI).

Puedes leer eso y pensar: ¡Un ángel! Eso es lo que necesito, ¡olvida eHarmony!

PERO tengo que señalar que de todas las criaturas terrestres de Dios, Dios en su providencia solo creó al hombre con la habilidad de juzgar racional y moralmente ̶ distinguir entre el bien y el mal.

Génesis 3:22: «22 Y dijo: «El ser humano ha llegado a ser como uno de nosotros, pues tiene conocimiento del bien y del mal. No vaya a ser que extienda su mano y también tome del fruto del árbol de la vida, y lo coma y viva para siempre» (NVI).

Parte de nuestro objetivo en esta clase es ayudar a informarte bíblicamente para que puedas pensar correctamente sobre este tema.

Volviendo a Abraham; así, el sirviente de Abraham viajó 500 millas desde Mesopotamia para buscarle a Isaac una esposa. Él la conoció en un pozo donde se detuvo a darle agua a sus camellos y en poco tiempo acordó la propuesta de matrimonio ¡sin siquiera haber nunca conocido a Isaac!

Ahora algunos de ustedes se están poniendo nerviosos, pensando si el consejo de nuestra iglesia para el noviazgo es hacer que tus padres arreglen un matrimonio para ustedes tal y como vemos en Génesis 24 (¡eso haría que mi enseñanza fuera más fácil y esta clase muy simple!). No temas, aunque aún se practica lo que son los matrimonios arreglados en diferentes lugares del mundo y este método se encuentra especificado en la Biblia, no es un mandato. Vale la pena señalar que el proceso de ir de soltero a casado ha cambiado a través de los años, y esto ha afectado la manera en que pensamos sobre el noviazgo. 

Breve historia del noviazgo 1900-2012

Beth Bailey, una profesora de Estudios Americanos en la Universidad de Nuevo México, narra la historia del noviazgo desde el 1900 hasta hoy[1]; así que en vez de comenzar con Abraham vayamos más adelante hacia el siglo 20.

1900s – A inicios de los años 1900 en América, un hombre joven agendó un tiempo para conocer a una joven en la sala de la casa de sus padres. Si el noviazgo prosperaba, la pareja podía avanzar hacia el porche de entrada, siempre bajo la vigilancia de padres cuidadosos. Ese proceso estaba llamado a proteger del peligro (abuso, violación), involucrar a la familia en el proceso de noviazgo, permitir al padre mantener lejos a hombres equivocados y reducir la oportunidad de inmoralidad sexual.

1920s – En los 1920, el urbanismo dio lugar a numerosos lugares sociales para citarse fuera de la casa. Ahora los solteros podían salir juntos a lugares como restaurantes, cines, y lugares de baile. La cita casual comenzó a hacerse más común.

1930s – Con el invento y proliferación del automóvil, la cita cambió dramáticamente con una nueva libertad encontrada para reunirse fuera del hogar de los padres. El dinero se convirtió en el medio a través del cual el hombre podía perseguir a una mujer, por lo cual sacaba a pasear a la chica en el carro y gastaba dinero en ella, y él podía esperar algunas cosas a cambio, no solo toda su atención, sino también favores sexuales.

1960s – En los 60, el movimiento feminista y su compañera la revolución sexual vino a escena. No pasó mucho tiempo para que el sexo casual se convirtiera en algo normal, Playboy y otras formas de pornografía eran vendidas en las tiendas, el aborto (1973) y el divorcio sin causa (1974) fueron legalizados. Consecuentemente, el sexo, la cita, el matrimonio y los hijos (la norma histórica) no fueron más vistos como asuntos relacionados. Las cosas se volvieron aún más confusas. Hoy en día puedes ver los resultados en una sociedad que es seriamente disfuncional, donde tu identidad sexual o aún el matrimonio es algo de preferencia individual.

Ahora el punto de tomar una breve mirada al desarrollo del noviazgo como es, no es sugerir que necesitamos adoptar las técnicas de noviazgo de hace un siglo, sino destacar el hecho de que lo que es «normal» en nuestra cultura no significa que está correcto; es desatacar que lo que pensamos acerca del noviazgo está frecuentemente afectado por el mundo en que vivimos más de lo que imaginamos. Como resultado, no podemos ser pasivos en nuestro pensamiento sobre el matrimonio o el noviazgo, sino que debemos hacer el duro trabajo de pensar de manera activa. Pablo nos recuerda en Romanos 12:2: «No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta».

Definiendo el noviazgo – ¿De qué estamos hablando?

Antes de irte a un viaje, necesitas determinar hacia dónde vas. Bueno, tenemos 6 semanas más en este viaje acerca de hablar sobre el noviazgo, por lo que un buen lugar para comenzar es definir nuestros términos. Así que ¿de qué manera definimos el noviazgo?: «El noviazgo es una relación entre un hombre y una mujer que se encuentran activa e intencionalmente juntos para considerar el matrimonio»[2]. Es una relación con propósito, el propósito de darse cuenta si Dios desea que ambos se casen.

Ahora, con una simple definición como esa podrías ser dejado con preguntas: «Pero, ¿cómo nos acercamos a alguien con el fin de tomar una decisión acertada sobre casarnos con ellos sin robarnos los privilegios del matrimonio?». O podrías preguntar: «¿Cómo podemos encontrar un cónyuge sin dejar un rastro de remordimientos y promesas rotas?». Nuestra definición sirve como una estructura simple con la que pasaremos varias semanas edificándonos hasta tener un conocimiento más completo del noviazgo bíblico. Conforme nuestro entendimiento del noviazgo bíblico sale a relucir, veremos que nos ofrece respuestas positivas a preguntas como estas.

Así que si el noviazgo es una relación donde un hombre y una mujer que se encuentran considerando el matrimonio de manera activa, ¿significa eso que el matrimonio es el destino? ¿Es un noviazgo exitoso uno que termina en matrimonio? En cierto sentido, podríamos decir que la respuesta es «si» no salen solo para tener un fin de semana divertido; están pensando en el matrimonio. Pero, por otro lado, la respuesta es «no», porque el objetivo es determinar si Dios desea que se casen, y si la pareja encuentra que la respuesta de Dios es «no», no debemos y pudieran salir de una manera que honre a Dios y no tengan remordimientos más adelante, entonces fue un éxito.

Como resultado, no deberíamos darle al noviazgo más importancia de lo que tiene. En otras palabras, salir a cenar o tomar un café no es lo mismo que una propuesta de matrimonio. Necesitamos darnos espacio el uno al otro y entender que hay un tiempo entre el inicio de cuando dos personas se están conociendo, y el final de un noviazgo cuando dos personas deciden casarse.

Asimismo, tampoco deberíamos tomar el noviazgo como algo muy sencillo. Aunque una relación de noviazgo no debe permitir que la intimidad supere al compromiso, hay un nivel de compromiso en el noviazgo porque las dos personas no están jugando sino tomando una decisión sobre si deberían pasar el resto de su vida juntos. El noviazgo no es un noviazgo casual de estilo americano que en muchos casos no tiene ninguna consideración seria de matrimonio.

Quiero detenerme aquí para ver si hay preguntas o comentarios, y para ver si entendieron lo que acabo de decir.

¿Estoy listo(a) para el noviazgo?

Con esta definición del noviazgo, responder la pregunta: «¿Estoy listo(a) para el noviazgo?», es un poco más simple porque en esencia estás preguntando que si comienzo esta relación y se mueve hacia el compromiso a un ritmo razonable, ¿estoy listo(a) para casarme? Podemos imaginar muchas situaciones donde una persona, por un tiempo, puede decidir enfocar su energía en algo diferente antes de buscar un esposo(a).

  • Podría ser que el individuo es un nuevo convertido y necesita crecer en su fe y madurar como seguidor en Jesús, antes de poder liderar una familia espiritualmente (en caso que sea el esposo) o ser una ayuda idónea (si es la esposa).
  • Podría ser que necesiten consejería bíblica sobre superar un pecado en particular como la pornografía, abuso de sustancias, o desorden alimenticio.
  • Podría ser que necesiten alguna ayuda con sus finanzas o hacer un plan donde puedan avanzar en la reducción de una montaña de deudas. No tienes que ser rico, pero si una situación financiera va a retrasar tu matrimonio debes comenzar.

En cualquiera de estas categorías, ¡es importante darnos cuenta de que no debemos esperar por la perfección o cualquier otra cosa porque sino ninguno nos casaríamos nunca! También, el matrimonio puede ser santificador, beneficioso y sanador. Sin embargo, necesitamos ser honestos con nosotros mismos y con lo que sea mejor para la persona con la que pensamos unir nuestra vida. Un deseo de intimidad debe estar bajo el control de la sabiduría. Según Pablo nos recuerda en Filipenses 2:3-4: «Nada hagáis por contienda o por vanagloria; antes bien con humildad, estimando cada uno a los demás como superiores a él mismo; no mirando cada uno por lo suyo propio, sino cada cual también por lo de los otros». 

Hacia dónde vamos desde aquí

¿De qué manera cambiamos de amistad a matrimonio? Lo que haremos durante el resto del seminario básico es hablar sobre el proceso de noviazgo, comenzando la próxima semana con iniciando la relación en el punto del compromiso y matrimonio. Así que, pueden ver en su folleto cómo hemos dividido lo que queda de la clase:

Semana 6 – Introducción al noviazgo

Semana 7 – El inicio

Semana 8 – ¿Y ahora qué hacemos? Las primeras etapas

Semana 9 – La etapa intermedia

Semana 10 – La etapa final

Semana 11 – ¿Qué tan lejos es muy lejos?

Semana 12 – Cosas equivocadas de nuestra cultura de noviazgo

Semana 13 – Panel

Vamos a movernos a través del proceso desde el inicio hasta el final. Y luego terminaremos con algunos pensamientos sobre la pureza sexual.

¿Cuál es la diferencia entre el noviazgo cristiano versus el noviazgo mundano?

Terminemos pasando algún tiempo considerando las diferencias entre las relaciones de noviazgo/cortejo cristiano y mundano.

El matrimonio cristiano tiene como objetivo ser emocional y físicamente íntimo con solo un miembro del sexo opuesto (que no es un familiar inmediato), tu cónyuge. Así que el objetivo del noviazgo/cortejo cristiano no es la intimidad inmediata, sino la intimidad futura. Una filosofía mundana del noviazgo no solo asume que habrá más de una relación íntima, sino que defiende el «juego en el campo» para determinar «lo que uno desea» en una pareja, y una de las maneras de encontrar lo que «queremos» es a través de la intimidad.

El mundo defiende actuar como si se estuviera casado (lo cual puede incluir vivir con alguien) para determinar si debemos casarnos con esa persona. El noviazgo mundano consiste en tratar de encontrar la persona correcta usando nuestro propio juicio corrupto. No es capaz de ver que su estilo y método de determinación promueve un egoísmo dañino que afectará el resto del matrimonio.

El noviazgo mundano asume que la única manera de conocer a una persona es pasando tiempo exclusivo con él o ella.

El noviazgo valora más el tiempo en grupo, para que los hombres y mujeres se encuentren protegidos de la mucha intimidad muy pronto.

El noviazgo cristiano es complementario. Dios creó a los hombres y mujeres diferentes y ordenó que cada uno de estos iguales espirituales jueguen diferentes roles en la iglesia y la familia. El noviazgo mundano es igualitario. No hay diferencias en estructura o roles aún cuando las expectativas y capacidades de cada sexo son muy diferentes.

El noviazgo cristiano asume que los largos períodos de tiempo juntos no son necesarios, porque lo que se persigue es un nivel apropiado de conocimiento necesario para decidir si un compromiso futuro es deseado y en orden. El noviazgo mundano asume que pasarán un buen tiempo juntos (mayormente solos) porque necesitas conocer a la persona más profundamente que a nadie en el mundo para saber si deseas estar con él o ella.

El noviazgo cristiano entiende que la felicidad personal no es (y, por tanto, el control de) el objetivo más importante de la relación. El noviazgo cristiano debe estar más enfocado en la santidad y el crecimiento espiritual. El noviazgo mundano asume que una buena relación suplirá mis necesidades, una mala no. Se enfoca en ser la persona correcta para suplir las necesidades de mi futuro cónyuge. Necesidades, debo enfatizar, que son frecuentemente motivadas por el pecado y que Dios en su providencia puede escoger no satisfacer.

El noviazgo cristiano entiende que bíblicamente, el compromiso viene antes de la intimidad. El noviazgo mundano asume que habrá un alto nivel de involucramiento emocional en una relación de noviazgo, y algún nivel de involucramiento físico.

El noviazgo cristiano entiende que bíblicamente, una parte de ser cristiano significa ser miembro de una iglesia y parte de la membresía es rendir cuentas a los demás (pacto de iglesia). Encontrarás que el consejo, guía, motivación y oración de los ancianos y creyentes mayores es muy valioso. El noviazgo mundano asume que lo que hago y con quien salgo es mi asunto y es privado (mi familia o la iglesia no tiene ninguna autoridad formal o práctica). 

Conclusión

Un par de pensamientos finales conforme cerramos. Cada relación de noviazgo no (no debería) es igual, esto no es una «talla única». Si no te das cuenta de ello, dejarás esta clase paralizado por la pregunta de si estás cortejando de la manera “apropiada”, con temor a avanzar por miedo a estar haciéndolo de manera equivocada; o simplemente ignorarás lo que has escuchado porque es un puñado de reglas imposibles. Puedes asumir que tienes que apresurarte en el noviazgo poniendo a un lado serias dudas o puedes permanecer en formas inútiles o potencialmente dañinas.

Esto no es un formato de reglas. Sin embargo, hay algunos absolutos que son violados a tu propio riesgo y para vergüenza de nuestro Salvador. La inmoralidad sexual viene a la mente.

Quiero decir desde el principio que recuerden que lo que hablamos son principios. Estos principios son explícitamente bíblicos o implícitos a partir de la sabiduría de las Escrituras. Vamos a basarnos en estos principios en cosas como amar genuinamente a otros, nuestra necesidad de sabiduría y perspectiva que viene a partir de la comunidad y la prioridad de la pureza sexual.

Una manera de pensar en ello es ver los principios no como grilletes, sino como la cerca alrededor del área de juego. Su propósito es mantenerte en territorio seguro, protegerte de cosas dañinas que están fuera de la cerca. Pero una vez que sabes lo que son esas cercas, entonces entra en el área de juego y diviértete. ¡El noviazgo debe ser algo que disfrutes!

Ahora, me imagino a través de la clase, que algunos de ustedes no estarán de acuerdo o estarán frustrados por algunas de mis declaraciones. Pero pregúntate a ti mismo porque sucede esto. ¿Qué tratas de retener de lo que piensas que este modelo te apartará (privacidad, secreto, autonomía, una idea secular de la libertad o tus propios derechos)? El punto final es que no vemos el noviazgo como una excepción a la regla de Dios en nuestra vida. Dios ha hablado, y Su palabra es suficiente para darnos todo lo que necesitamos para la vida y la santidad.

2 P. 1:2-3: «Gracia y paz os sean multiplicadas, en el conocimiento de Dios y de nuestro Señor Jesús. Como todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad nos han sido dadas por su divino poder, mediante el conocimiento de aquel que nos llamó por su gloria y excelencia».

2 Ti. 3:16-17: «16 Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia, 17 a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra».

Por tanto, queremos que pienses y actúes bíblicamente en todas las áreas de tu vida, incluyendo la manera en que tratas, ofreces amistad, y cortejas hermanos y hermanas en Cristo.

[1] Amy A. Cass, ed., Leon R. Cass, ed., Wing to Wing, Oar to Oar: Readings on Courting and Marrying, (Universidad de Notre Dame Press, 2000), pgs. 27-37

[2] Joshua Harris, Boy Meets Girl: Say Hello to Courtship, (Colorado Springs: Multnomah Books, © 2000, 2005 Joshua Harris), pg. 27